miércoles, 21 de agosto de 2013

Origen y significado de los apellidos piamonteses

Indice alfabético de Io mi chiamo... Dizionario dei Cognomi Piemontesi
de Piero Abrate 
Los nombres y apellidos con los que identificamos a las personas, al igual que las otras palabras del vocabulario de la lengua, forman parte de nuestro acervo lingüístico. Sin embargo, no tenemos de ellos, generalmente, el mismo grado de conocimiento. Los primeros, sean nombres de pila o no, despiertan una curiosidad que con bastante facilidad podemos satisfacer remitiéndonos a la libre elección llevada a cabo, dentro del amplio marco legal, por los padres, quienes escogen tal o cual nombre por gusto personal, tradición familiar o moda. Por su lado, los apellidos, mayoritariamente transmitidos desde hace siglos, suscitan un inmenso interés psicológico y social pues son, de alguna manera, el reflejo y la impronta de las civilizaciones pasadas.

Desde tiempos antiguos, el hombre sintió la necesidad, dado el número relativamente limitado de nombres, de añadirles otras denominaciones que permitieran evitar confusiones. Los apodos u otro tipo de precisiones desempeñaban el papel de apellido, como por ejemplo: Juan el hijo de Pedro, Antonio el de la casa grande, Miguel el molinero, Santiago el calvo, etc.

La cristalización de los apellidos se da entre la baja Edad Media y los comienzos de la Edad Moderna. Desde entonces, no varían ni aumentan numéricamente, algunos han podido incluso desaparecer por extinción de los grupos familiares que los llevaban. A la fijación de los apellidos contribuyeron en gran medida: en primer lugar, el uso cada más frecuente de documentación legal y notarial referente a transacciones, acuerdos, donaciones, ventas (del clero y de la alta sociedad), y luego, desde la segunda mitad del siglo XVI, a los documentos notariales se suman los registros eclesiásticos de toda la población, cuya obligatoriedad fue establecida por el Concilio de Trento.

Véase asimismo Aparición temprana de los apellidos en el Piamonte medieval.

Teniendo en cuenta el tipo de nombre, o más bien sobrenombre, en que se originan los apellidos, éstos pueden clasificarse en:

1/ Apellidos patronímicos y matronímicos

Un recurso muy frecuente a través de la historia de Occidente ha sido el de añadir al nombre de una persona el nombre de su padre o de su madre, lo cual permite distinguir dos o más personas con el mismo nombre de pila. Así pues, a partir de una denominación antroponímica como Juan el hijo de Pedro o Juan el hijo de María, se llega por economía de palabras a Juan de Pedro y Juan de María. En muchos casos, la preposición que une originariamente a ambos nombres desparece, y en otros, se aglutina con el segundo nombre. El resultado de tal procedimiento es que el nombre del padre o de la madre acaba siendo un apellido hereditario. Ejemplos de apellidos patronímicos y matronímicos piamonteses son: Agnese, Caterina, Chiaffredo, Daniele, Delfino, Demaria, Depetris, Destefanis, Fassio (de Bonifacio), Giovannini/Gioannini (de Giovanni), Giuliano, Giuseppe, Martina, etc.

Cabe recordar que un gran número de apellidos patronímicos piamonteses son de origen germánico: Aicardi, Aimar/Aymar, Arduino, Airaudo/Ariaudo, Arnaud/Arnaudo, Ameri, Berardi/Berardo, Boccardo, Garnero/Garneri, Mainardi/Meinardi/Minardi, Sicardi/Siccardi, Valfrè/Galfrè, etc. En su formación originaria encontramos invariablemente dos elementos: un sustantivo y un adjetivo calificativo de sentido laudatorio, que le precede.     

2/ Apellidos toponímicos y étnicos

Otro recurso tendiente a evitar los casos de homonimia es el de añadir al nombre de pila el lugar de procedencia o el gentilicio que denota el origen de la persona. Los resultados de tal procedimiento dan cuenta de los frecuentes movimientos migratorios de nuestros ancestros: de país a país, de una ciudad o aldea a otra, o incluso de un sitio característico a otro, dentro de los límites de una misma comarca. He aquí algunos ejemplos de este tipo de apellidos:

Airasca (localidad de la Prov. de Turín), Allemandi, Allaman, Borgogno, Borgognone, Canavese (zona al norte de Turín), Canavesio (id.), Carmagnola (ciudad de la Prov. de Turín), Ceresole (procedente de Ceresole d'Alba [Cn] o de Ceresole Reale [To]), D'Azeglio, Francia, Francese, Lombardi, Milano, Montecucco (localidad de la Prov. de Alessandria), Ottolenghi (ciudad alemana Ettlingen), Piasco (localidad de la Prov. de Cuneo), Saluzzo (ciudad de la Prov. de Cuneo), Turco, Usseglio (localidad de la Prov. de Turín), Vercelli.

Otros topónimos, denominados menores, dan origen a numerosos apellidos como: Fontana (fuente, manantial), Fossati (de fosso foso), Massa (propiedad rural), Montagna (montaña), Monti (montes), Ponte (puente), Porta (puerta de una ciudad), Torre, Valle/Avalle/Devalle.

3/ Apellidos derivados de oficios, cargos, títulos, condición social

Muchos son los apellidos hereditarios que se originan en nombres de oficio, profesión, cargos, títulos y otras denominaciones referentes a la condición social del individuo.  

Abate (abad), Abbà (abad), Barbero (barbero, cirujano menor), Beccaria (carnicería carnicero), Bergero (pastor de ovejas), Bottero (tonelero), Cagliero/Callieri (zapatero), Caligaris (zapatero), Clerici (de chierico clérigo), Conte (conde), Cravero (pastor de cabras), Don (señor, patrón), Duca (duque), Fornero/Forneris (dueño de un horno o panadería), Gastaudo (intendente), Giudice (juez), Magnano (herrero, hojalatero), Marchese (marqués), Masoero (mediero), Molinaro/Molineris (molinero), Muratore (albañil), Passalacqua (balsero), Pellissero (peletero), Pignata/Pignatta (olla fabricante de ollas), Piovano (párroco), Prete (sacerdote), Re (rey), Sartoris (del sastre), Scrivano (escriba), Signorelli (de signore persona importante), Soldano (sultán), Testore (tejedor), Vesco (obispo), Zavattero (zapatero), etc.

Cabe precisar, por una parte, que los apellidos derivados de cargos eclesiásticos, como Abbà, Cardinale, Prete, Vesco y Vescovo, se originaron antes de la celebración del Concilio de Trento, que prohibió definitivamente el matrimonio de los clérigos, y como tales se han transmitido hereditariamente hasta nuestros días; y por otra parte, que algunos apellidos, como Conte, Duca y Re, no reflejan necesariamente una relación con personas que ostentasen tales cargos, sino que en la mayoría de los casos se trata de motes aplicados a personas de ciertas características: arrogancia, altanería, etc.

4/ Apellidos procedentes de apodos o de descripciones

Según los especialistas en antroponimia, los apodos constituyen el procedimiento más antiguo que existe para distinguir a las personas. Revelan la psicología de nuestros ancestros, a menudo burlones y despiadados en lo que se refiere a defectos físicos y morales. Si bien algunos de ellos son fáciles de comprender, el sentido de muchos otros resulta sumamente difícil de interpretar ya sea porque son antiguas voces populares actualmente inexistentes, o bien porque desconocemos qué sentido podían tener en el imaginario popular.

Los apodos que dieron lugar a la formación de apellidos pueden referirse a: características fisicas o morales, a animales relacionados con la actividad del individuo o por alguna semejanza física o comportamental entre la persona y el animal, a plantas relacionadas con la actividad ejercida o por la comparación de determinados rasgos físicos, a vínculos de parentesco, edad, etc. He aquí algunos ejemplos:

Características físicas: Bianco/Biancotti/Biancotto/Bianciotti/Bianciotto (blanco, blanquecino), Bodoira (barriga, panza), Borgna (tuerta, ciega), Bruno (moreno), Calvo, Gamba (pierna), Grasso (gordo), Grosso (grande), Morero/Morello/Moro (moro, moreno), Negro, Quattrocchi (persona con anteojos), Occelli (del piam. uciaj, persona con anteojos), Ricci (rizos, rulos), Testa (cabeza).
Características morales: Avaro, Bono (bueno), Gentile (gentil), Malerba (mala hierba → mala persona).
Descripción de cierto comportamiento: Saccavino, Pittavino, Bevilacqua (aplicado a alguien dado a la bebida).
- Animales: Bo (de bove = buey), Cavallo (caballo), Coniglio (conejo), Galletto (gallito), Grillo (grillo), Leone (león), Lupo (lobo), Mosca, Quaglia (codorniz), Volpe (zorro).
- Plantas, árboles, frutos: Bruera (brezal), Castagno (castaño), Dell'Erba (de la hierba), Dellorto (del huerto), Delprato (del prado), Fenoglio (hinojo), Fiore (flor), Formento (trigo), Oliva (aceituna, oliva), Prato (prado).
Edad: Giovinetti (de giovine = jóven), Vecchio (viejo).

5/ Apellidos procedentes de consagraciones, bendiciones, augurios o hechos relativos al nacimiento

Estos apellidos, sumamente frecuentes en toda la península itálica, constituyen en el Piamonte casos de personas procedentes de otras regiones. Encontramos, sin embargo, tres apellidos augurales piamonteses: Benvenuto (= bienvenido), Durando, variante del panitaliano Durante, con el significado de "firme, perseverante en la fe, en el bien", y Pasquale, derivado de pasqua (= Pascuas de Resurrección).

Algunas consideraciones especiales respecto de los apellidos piamonteses

- Los apellidos piamonteses, si se exceptúan los casos de aquellas grafías latinas heredadas sin que mediase ninguna alteración o adaptación (Actis, Baralis, De Canibus, Depetris, Giorgis, De Giorgis, Grandis, etc.), poseen, a diferencia de lo que sucede, por ejemplo, con los apellidos vénetos, una forma toscanizante, por la que se diferencian, al menos en la pronunciación, de las formas piamontesas originarias, por ej.: Alfero (Alfé), Arnaudo (Arnaud), Balsari/Baussaro (Baussé), Beraudo (Beraud), Bernardi/Bernardo (Bernard), Bernero (Berné), Bodrero (Bodrié), Chiantore (Ciantor), Cordero (Cordé), Cravero (Cravé), Fasano/Fagiano (Fasan), Fenoglio (Fënoj), Gastaudo (Gastaud), Giraudo (Giraud), Gribaudo (Gribaud), Seimandi (Seimand), Pautasso (Pautàss), Turletti/Turletto (Torlet), Viglianco (Vianco)

- Al igual que en otras lenguas romances, los apellidos piamonteses suelen adoptar desinencia femenina cuando designan personas de sexo feminino, sin que ello implique que se trata de apellidos matronímicos. Así, por ejemplo: Anna Marconetta puede remitir a las entidades Anna la esposa (o la viuda) de X Marconetto o Anna la hija de X Marconetto. En algunos casos, la existencia de tal forma antroponímica femenina puede originar ambigüedad. Por ejemplo, Martina, apellido piamontés de bastante difusión, puede, según los casos, representar un apellido hereditario matronímico (hijo o hija de Martina) o bien un apellido herededitario patronímico con desinencia femenina por tratarse de la esposa o la hija de un individuo de apellido Martino.

- En el Canavese (zona al norte de Turín) y, en menor medida, en el Biellese (Biella y alrededores), como asimismo en varias ciudades de la Provincia de Cuneo, existe un número considerable de apellidos dobles, a veces unidos por un guión, con los que se evitan las frecuentes homonimias a que dan lugar las repeticiones de apellidos.

Ejemplos de apellidos dobles del Canavese son: Actis Alesina, Actis Caporale, Actis Danna, Actis Dato, Actis Goretta, Actis Grande, Actis Grosso, Actis Peiro, Actis Piazza, Actis Tessitore, Aseglio Gianinet, Aseglio Castagnot, Aseglio Francot, Baima Besquet, Baima Beuc, Baima Chiadò, Baima Pcit, Balbo Mossetto, Brach Bettas, Brach Ciaros, Brach Prever, Brachet Barbus, Brachet Cota, Brachet Contol, Brachet Sergent, Bria Berter, Cagna Vallino, Ceretto Verra, Chiadò Caponet, Corgiat Mecio, Corgiat Loia, Garigliet Brachet, Gent Binet, Frand Genisot, Merlo Pich, Panzia Oglietti, Picca Cesa, Rubat Baleuri, Ruo Roch, Savant Ros.

En el Biellese, encontramos los siguientes apellidos dobles: Barberis Conte, Barberis Campo, Barberis Forno.

En Saluzzo, Provincia de Cuneo, se da con cierta frecuencia el apellido doble Genre-Costa.

En la ciudad de Cavallermaggiore, Provincia de Cuneo, son frecuentes el apellido doble Alloa Casale y su variante Casale Alloa.

En la zona de Barge, Provincia de Cuneo, aparecen los apellidos dobles: Besso Pianetto, Bessone Neisin, Borda Bossana, Borda Lotta (a veces amalgamados en una sola palabra: Bordabossana, Bordalotta), Coero Borga, Dana Borga y Genre Costa.

En Bagnolo Piemonte, Provincia de Cuneo, encontramos el apellido doble Bruno Franco y la variante Brun Franc.

En la zona de Revello, Provincia de Cuneo, es dado encontrar el apellido doble Chiappero Grandis.

En Brossasco, Provincia de Cuneo, encontramos los apellidos dobles Garnero Faggero y Monge Collino.

En Piasco, Provincia de Cuneo, se da con cierta frecuencia el apellido doble Monge Cuniglia.

En la zona de Sanfront, Provincia de Cuneo, aparece el apellido doble Picca Nicolino.

En Venasca, Provincia de Cuneo, encontramos el apellido doble Monge-Malitta.

- En los enclaves piamonteses de lengua walser, situados al pie del Monte Rosa, en las provincias de Verbano-Cusio-Ossola y Vercelli, existen desde la alta Edad Media numerosos apellidos de origen alemánico como: Balmer, Bodmer, Bunder, Grober, Gruber, Giger, Malber, etc. Con el correr del tiempo, algunos de ellos fueron romanizados: Heinrich → Errico, Heinz → Enzio, Jung → Ionghi, Roker → Ronco, etc. Otros fueron adaptados: Schmied (= herrero) → Ferrari, Ismann (= hombre de hierro) → Ferro, etc.

- Por último, es preciso señalar que existen asimismo en el Piamonte numerosos apellidos occitanos correspondientes a familias originarias de los antiguos Escarton d'OulxEscarton de Pragelato (Provincia de Turín) y Escarton de Châteaudauphin (Valle Varaita, Provincia de Cuneo), como también de los valles Chisone, Germanasca y Pellice, cuyos habitantes, descendientes de disidentes religiosos del sur de Francia y radicados en el Piamonte desde la Edad Media, profesan la fe valdense.

Algunos de los apellidos de los citados Escartons, cuyo análisis revelaría orígenes y significados análogos a los ya vistos para los apellidos piamonteses en general, son los siguientes: Arnaud, Balmas, Bert, Bertalot, Blanc, Bonnin, Bourcet, Brun, Brunet, Casse, Challier, Challiol, Chareun, Charrier, Clapier, Comte, Estienne, Genre, Gros, Guiguet, Levet, Long, Martin, Perron Cabus, Poncet, Pons, Ribet, Richard, Roman, Roux, Vallory.

Para información acerca de apellidos occitanos presentes en la Argentina, véanse Primeras familias piamontesas de San José y Colón, Primeras familias piamontesas de Gualeguaychú y Primeras familias piamontesas de Villa Elisa.

En cuanto al extenso listado de apellidos valdenses, véase Noms vaudois - Généalogie.

Véase asimismo Apellidos valdenses en actas sacramentales...


Bibliografía

Abrate Piero (2009), Io mi chiamo... Dizionario dei Cognomi Piemontesi, Abacus Edizioni.
Addobbati A., Bizzocchi R. e Salinero G. (2012), Precocità dell'affermazione del cognome nel Piemonte medievale in L'Italia dei cognomi. L'antroponimia italiana nel quadro del Mediterraneo, pp 215-29. Pisa, Italia.
De Felice Emidio (1886), Dizionario dei Cognomi Italiani, Mondadori Editore, Cles (TN), Italia.


Enlaces

http://www.cognomiitaliani.org/cognomi/cognomi0001ld.htm#top
http://www.cognomix.it/